La Cornudilla
Los cerca de cuarenta habitantes del pueblo de la Cornudilla, Requena (Valencia), abandonaron sus casas en los años 50 a consecuencia de una sucesión de fenómenos extraños que acontecían en las viviendas y que acabaron por aterrorizar a los vecinos. Desde entonces, la Cornudilla es uno de los pueblos malditos de España.
Los fenómenos paranormales por los que salieron huyendo no fueron revelados hasta el año 2000, gracias a un estudio muy detallado, publicado en una revista especializada. Gracias a él descubrimos el caso de poltergeist que se vivió en la aldea y del cual los habitantes no querían ni hablar por el miedo que aún les causaba el recuerdo.
Corren innumerables leyendas y testimonios de lo que allí ocurrió.
Se cuenta que era frecuente escuchar en el interior de las casas murmullos, ruidos o voces procedentes de no se sabe dónde. Se veían sombras que deambulaban de un sitio para otro y ruidos nocturnos. Todos estos acontecimientos llevaron el terror a los habitantes, nadie sabía qué ocurría ni por qué.
Estas misteriosas manifestaciones se esfumaron del mismo modo en que aparecieron, sin explicación alguna, excepto en una casa. Una casa que estaba algo separada de las demás, allí seguían ocurriendo fenómenos inexplicables. Esa casa fue conocida por los lugareños como "La Casa del Ruido".
La Casa del Ruido o la casa maldita era una casa pequeña separada del pueblo unos metros. Se cuenta que en ella se oía al caer la noche ruidos estremecedores y estruendosos de todo tipo, procedentes del pozo interior de la vivienda. En el piso de arriba se escuchaba el ruido de cadenas agitadas contra el suelo. También eran frecuentes fenómenos poltergeist donde objetos eran arrojados contra las paredes sin ningún motivo aparente.
Los animales también parecían notar la maldición que caía sobre aquella casa se cernía. Tanto los perros como los caballos se inquietaban y agitaban.
En la actualidad casi no queda nada de ese centenario pueblo, más que muros y restos de lo que un día fue un pueblo feliz. Pero allí, misteriosa y oscura, aún encontramos la casa del ruido.
Terrassa: un escenario de cine encantado
Concretamente a dos kilómetros de Terrassa, en la provincia de Barcelona, nos encontramos con un edificio donde se entremezclan la realidad y el misterio.
Es el antiguo Hospital del Tórax, donde numerosos testigos dicen percibir sensaciones extrañas o ver sombras espectrales. Muchas de las fotografías tomadas allí «capturan» detalles inexplicables y las grabadoras, cámaras de vídeo y otros aparatos electrónicos sufren anomalías de forma demasiado habitual.
El edificio se ha ganado fama de maldito, y no sólo por los extraños fenómenos que supuestamente suceden en su interior, sino también por los suicidios que ocurrieron entre sus paredes, los restos humanos que permanecen diseminados por distintas estancias y los ritos de corte satánico que todavía hoy se siguen celebrando allí. Recientemente hemos sabido que algunos de los testigos de esos misteriosos fenómenos son actores, directores de cine y técnicos de rodaje, además de las empleadas del centro de disminuidos psíquicos «La Pineda», situado en la parte habilitada del antiguo hospital.
Hace algunos años, cuando el centro sanitario se encontraba en pleno funcionamiento, sus pacientes provenían de diferentes puntos de la geografía española, lo que conllevaba que muchos de ellos se sintieran solos, pues sus familiares no podían abandonar las ocupaciones diarias para atenderlos. Así, el estado depresivo de algunos internos, añadido a su delicada salud, los inducía en ocasiones al suicidio.
Con el paso del tiempo, nació una especie de ritual macabro: el enfermo se tiraba por la ventana de una de las habitaciones de las últimas plantas e impactaba en el jardín trasero, conocido a partir de entonces como «la jungla», debido a los gritos que se escuchaban cuando alguien se lanzaba al vacío. Lo cierto es que los datos no mienten, pues la media de suicidios en el Hospital del Tórax de Terrassa siempre fue superior a la de cualquier otro centro sanitario.
El edificio muestra hoy un aspecto lamentable. Un rápido paseo por las instalaciones permite constatar el estado de absoluto abandono en el que se encuentran las más de doscientas habitaciones. Tan sólo se salvan las dos zonas que todavía permanecen habilitadas. Una sirve de set en el que la productora de cine Filmax realiza algunos de sus rodajes cinematográficos y otra, en el extremo del inmenso edificio, se utiliza de forma provisional para el centro de disminuidos psíquicos «La Pineda».
De todos modos, más del noventa por ciento del hospital se encuentra abandonado y con signos evidentes de que en su momento se produjo un desalojo repentino. En las diferentes estancias es habitual encontrarse con basura, sillas, camas, televisores viejos, aparatos médicos, archivos, radiografías e incluso coronas de muertos o taquillas rebosantes de objetos personales.
Fantasmas en el plató
El director de cine Jaume Balagueró conoce bien el Hospital del Tórax de Terrassa, ya que ha rodado allí algunas de sus películas de terror, como Frágiles o Los sin nombre. Precisamente, durante la grabación esta última, aseguró que los actores acudían al baño de dos en dos porque el lugar les trasmitía sensaciones extrañas. Otro realizador español, Luis de la Madrid, también rodó parte de las escenas del film La monja en el antiguo hospital. En su momento confesó públicamente que jamás volvería al lugar, pues allí fue testigo de sucesos extraños.
Montse Mostaza, actriz de la película Ouija, rodada también parcialmente en el Hospital del Tórax de Terrassa –otras escenas se filmaron en el cementerio de la ciudad y en un pueblo de montaña cercano, llamado Mura–, aseguró en una entrevista concedida a la revista digital Anika Cine que, a pesar de no creer en la existencia de fenómenos paranormales, el edificio le trasmitía una sensación de incomodidad, por lo que tenía que salir del hospital a la hora de los descansos y la comida.
Por su parte, el director de esa terrorífica película, Juan Pedro Ortega, explicó en otra entrevista a ese mismo medio que, mientras duraba la grabación, se produjeron fenómenos muy extraños, como ruidos, gritos y susurros inexplicables que mantuvieron en tensión a todo el equipo de rodaje. Además, la película Ouija estuvo salpicada por otros sucesos no menos curiosos. Un miembro del equipo, por ejemplo, sufrió un accidente de moto inquietantemente similar al que protagonizaba uno de los personajes del film. ¿Simple casualidad?
Por el contrario, en otras películas rodadas igualmente en el antiguo hospital y dirigidas por Brad Anderson –El maquinista y Session 9– no se tiene constancia de que se produjeran fenómenos extraños, o al menos no han sido divulgados.
Cortijo Jurado
Trescientas sesenta y cinco ventanas, dos plantas, torreón mirador, muros de ladrillo ocre, tejado de pino rojo, estructura cerrada y rasgos arquitectónicos anglosajones.
La imagen de Cortijo Jurado, un caserón desvencijado ubicado en la cima de un altozano del Valle de Guadalhorce, en las cercanías de la localidad de Campanillas, parece sacada de cualquier pesadilla de los literatos del terror Lovecraft o Poe y, durante las últimas décadas, ha despertado incertidumbre e inquietud entre los malagueños debido a los presuntos fenómenos inexplicables que se producen en su interior.
Encuentros con lo insólito que, desde hace un año, han acaparado la curiosidad de investigadores y medios de comunicación de toda España para intentar buscar respuesta al supuesto misterio que alberga la estremecedora mansión.Objetos que son movidos por manos invisibles, figuras espectrales que deambulan por los pasillos y habitaciones, luminarias que aparecen y desaparecen.
Gritos de origen desconocido, golpes repetitivos y violentos, son algunos de los sucesos de los que han podido ser testigos un gran número de personas.
Un enigma que comienza a desarrollarse alrededor de 1850. Tras la muerte de Manuel Agustín Heredia, constructor y propietario, el edificio pasó a manos de sus descendientes y se transformó en el escenario de varios episodios dramáticos que han marcado el lugar de una forma lóbrega y truculenta.
Cuerpos incorruptos.
Una leyenda negra que se fragua con la presunta desaparición y asesinato de varias adolescentes en Cortijo Jurado. Muertes, de las cuales no hay confirmación oficial en los registros de las fuerzas de seguridad del estado como así tuvimos la ocasión de constatar, pero que son una conocida realidad entre algunos vecinos de la urbe de Campanillas, antaño la barriada de los empleados de la villa.Los antiguos trabajadores han afirmado la realidad de estos delirantes y dantescos homicidios en base a la existencia de subterráneos, criptas y pasadizos.
Los lugares donde presuntamente se llevaron acabo extraños rituales y que, como afirma la trágica leyenda del enclave, se utilizaron para no dejar pesquisa alguna de las presuntas ceremonias que allí se realizaban.
Ritos que nada tienen que ver con el satanismo, como así han divulgado diversos investigadores en muchos medios de comunicación, sino, como pudimos averiguar con la práctica de liturgias masónicas debido en gran parte a las conexiones mercantiles y enlaces matrimoniales entre las familias malagueñas e inglesas.
No han vuelto a dar permiso de entrada a nadie.
Pasadizos, cuyas entradas estarían ubicadas en el patio y en la cocina, como así lo manifestó Manuel Martínez, empleado durante la década de los años cincuenta. Mito o leyenda, lo cierto es que desde mediados de siglo se han recogido un gran número de testimonios de lo imposible. Testigos de fenómenos que aparentemente no tienen una explicación lógica. ¿Qué misterio se escondía entre los muros del caserón? ¿Qué clase de sucesos estaban presuntamente desarrollándose en la villa andaluza?
Los insólitos episodios que se producen en la villa andaluza también pudieron ser experimentados durante el rodaje de un cortometraje. La compañía de Teatro Independiente de Málaga decidió tener como escenario los muros de Cortijo Jurado.
Pero un cúmulo de casualidades “malditas” acaparó la grabación del film “Un golpe definitivo” dirigido por Jorge Rivera, como así constató a través de los micrófonos de Milenio 3 y ratificó Quique Mesa, uno de los productores del celuloide.
Los resultados obtenidos durante la última investigación en Cortijo Jurado no han hecho sino aumentar el misterio. Por un lado, se consiguieron filmaciones en las que aparecen bolas luminosas atravesando el campo de visión de izquierda a derecha y que, hasta la fecha, no tienen explicación racional alguna. Se obtuvieron grabaciones de voces no audibles durante las experiencias, entre otras “Que”, “Hola”, “Soy Yo”, y que de momento son de origen inexplicable. Y en dos, de las 300 instantáneas realizadas, quedaron plasmados efectos lumínicos insólitos.
No hay constancia absoluta de la existencia de criptas y salas mortuorias en el subsuelo de Cortijo Jurado, a pesar, de que algún inconsciente, sin autorización por parte de la empresa propietaria, decidió excavar en el patio del caserón malagueño en busca de subterráneos y que fue el causante del accidente de uno de los muchos curiosos que invadían, a pesar de advertir siempre en los programas radiofónicos y televisivos que la mansión era propiedad privada, de forma ilegal la villa malagueña.
Fuente: http://www.todoleyendas.com/leyendas/Fantasmas/Cortijo_Jurado.php
lunes, 30 de julio de 2007
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1 comentario:
LA verdad esto esta muy interesante. Me gustaria poder visitar espana y de igual manera poder visitar todos esos lgares tan padres. bueno suerte amigos espanoles. besitos..)i(
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